Marchar por la Universidad de Los Andes es hacerlo por Venezuela, por la libertad y la necesidad de levantar la voz. La conciencia general es que llegó el momento de expresar nuestra solidaridad por la universidad y el país. La convocatoria a la gran marcha de este miércoles 18 de noviembre de 2015, tuvo la llama impulsora de los estudiantes, quienes reconocen la trayectoria histórica de la Universidad de Los Andes, que por más de 230 años ha formado miles de profesionales e investigadores con el objetivo de dar respuesta a las necesidades de crecimiento y desarrollo de la nación. Las razones que la nueva generación estudiantil ulandina expone a merideños y universitarios en general para marchar este miércoles 18, tiene su asidero en lo que consideran es un nuevo ataque de la Asamblea Nacional, con la instigación a la intervención que busca afectar la autonomía universitaria. También prevalece como punto de honor para la protesta la crisis presupuestaria instaurada desde el año 2008 que ha estado paralizando una a una la dinámica de la gran mayoría de las dependencias de la universidad. La precariedad de los salarios de docentes y trabajadores, así como la merma de los servicios estudiantiles afectados duramente por la galopante inflación y escasez son también motivo de primer orden para marchar y protestar. La necesidad de una educación de calidad bajo las doctrinas de la democracia y la libertad de pensamiento es otro de los clamores de los estudiantes de la ULA. Hoy replican la frase con la cual concluye cada acto el ciudadano rector: “Si hoy no tienes tiempo para tu universidad, cuando ya no la tengas, quizá ya el tiempo no sirva”. La convocatoria a la marcha de este miércoles 18 de noviembre, también fue ratificada en el reciente Consejo Universitario Extraordinario Ampliado. La concentración será en predios de la Facultad de Ciencias Económicas y Sociales (Faces), a partir de las 9 de la mañana para llegar frente a la sede de la Federación de Centros Universitarios en la avenida Don Tulio Febres Cordero.