Los estudiantes de la Universidad de Los Andes (ULA), agrupados en diferentes movimientos estudiantiles, ratificaron que se mantendrán en las calles, pacíficamente, exigiendo al Gobierno nacional los recursos para el funcionamiento de la ULA y que se pueda cumplir con el servicio del comedor universitario.

Así lo informó en rueda de prensa Jorge Arellano, presidente de la FCU, quien afirmó que unos 18 mil estudiantes de la ULA se ven afectados con el cierre del comedor universitario que se mantuvo abierto hasta este martes 15 de marzo debido a que la ULA ya no tiene recursos para cancelar las bandejas de comida.

Denunció Arellano que en las protestas de este martes 15 de marzo, fueron detenidos 5 estudiantes que estaban manifestando pacíficamente y que fueron golpeados brutalmente por oficiales de la Policía.

Agregó que en horas de la noche fueron liberados 3 de los jóvenes detenidos y los otros dos jóvenes, Luis Villareal y Luis Márquez, fueron paseados por varios lugares por los organismos de seguridad y, a eso de las 11 de la noche, los dirigentes estudiantiles se enteraron que los tenían la sede de Inteligencia en Santa Juana, a donde acudieron directivos de la FCU, encabezados por Jorge Arellano, quien constató que los dos estudiantes de la ULA fueron golpeados y maltratados física y verbalmente.

Hablan dirigentes estudiantiles

Eloi Araujo, secretario de la FCU, dijo que es crítica la situación de los estudiantes ulandinos que no son de la ciudad pues al no contar con el servicio del comedor, muchos han tenido que regresar a sus casas porque si no pueden pagar una habitación menos podrán costearse la comida, pareciera -afirmó- “que a este régimen del Sr. Nicolás Maduro no le importa la Universidad, porque más allá del comedor universitario, el problema es de presupuesto, porque no hay recursos para que el transporte funcione, para becas dignas, para que los laboratorios funcionen, para prácticas de campo, en fin, la Universidad está en puertas de un cierre técnico y los estudiantes son las más afectados”.

 

Por su parte Carlos Ramírez, estudiante de Ciencias Políticas, aseguró que continuarán las protestas, pacíficamente, porque al igual que a la ULA no le han enviado recursos y no tiene comedor, la gente también está pasando hambre por la escasez de alimentos y el alto costo de los pocos alimentos que se consiguen tal como quedó demostrado este martes por la noche cuando en 5 sectores diferentes de Mérida, la gente salió a respaldar y pedir la liberación de los estudiantes. Por eso seguirán en la calle y destacó que, en vez de mandar bombas y perdigones a los estudiantes, deben enviarles libros y recursos para que los estudiantes continúen sus estudios, así como buscarle alimentos y medicinas al pueblo que también tiene hambre y necesidades. María de los Ángeles Pérez. 9795. Prensa ULA. Fotos Lánder Altuve